Sunday, April 19, 2015

Entrevista en EL PERUANO


Hoy en EL PERUANO me entrevistan para continuar la conversación de la mesa “Contra la Memoria”, que tuvimos hace tres semanas en Casa de la Literatura Peruana (pronto en LEE POR GUSTO aclararé algunos equívocos que surgieron a partir de ese conversatorio). Como el espacio en prensa nunca es tan amplio como nos gustaría a entrevistadores y entrevistados (lo que obliga a la tijera), aprovecho que la entrevista fue vía email para copiar debajo el texto completo. Debajo el link a la versión web. Muchas gracias a María Luz Crevoisier por la nota. 

ALONSO CUETO, CON QUIEN COMPARTES INVITACION A LA FERIA DEL LIBRO DE SANTO DOMINGO, DICE QUE "NO PUEDE HABER RECONCILIACION NI PERDON MIENTRAS NO SE HAGA JUSTICIA". ¿UNA FORMA DE HACERLA SERIA ESCRIBIENDO SOBRE ESA ETAPA DE SANGRE Y LUTO?
La justicia es necesaria y hay que luchar por ella, en eso estoy plenamente de acuerdo. No estoy tan convencido de que deba existir reconciliación y perdón. Pero justicia sí, sin ninguna duda. No se puede simplemente dar vuelta a la página. Pero ese es un tema que habría que desarrollar con mayor amplitud. En cuanto a tu pregunta, no creo que la literatura deba asumir una responsabilidad que le corresponde a los tribunales. Ninguna novela podrá ofrecerte la justicia que no encuentras en la vida cotidiana. Para eso existe un aparato judicial. 

SE DICE TAMBIEN QUE OLVIDAR EL PASADO ES UNA MANERA DE OLVIDARSE A SI MISMO. PERO TE PREGUNTO, ¿ES SALUDABLE RECORDARLO CON TANTA INSISTENCIA? ¿PUEDE SERVIR PARA LOGRAR UNA REDENCIÓN O SIMPLEMENTE A HASTIARNOS CON EL TEMA Y NO PRESTARLE MÁS ATENCION?
Depende de cómo se aborde el tema. Pero más allá de si uno decide escribir sobre el conflicto armado interno o sobre otros temas, lo importante es no olvidar que la mirada sobre el pasado debe servir no tanto para congelarlo o volverlo pieza de museo sino para explicar el presente. No solo para “recordar lo que ocurrió”, como si estuviéramos haciendo ese trance recordatorio desde un momento de perfección, sino para ayudarnos a comprender los conflictos que siguen siendo parte de nuestra realidad y de ninguna manera se agotaron con la guerra con Sendero Luminoso. 

EN "LA LINEA EN MEDIO DEL CIELO" TOCAS EL TEMA SOBRE AQUELLOS AÑOS. ¿LO HICISTE CON EL PROPÓSITO DE EXORCIZAR TUS FANTASMAS?
No, yo no creo que la literatura exorciza los fantasmas porque no creo ni en los exorcismos ni en los fantasmas. Mucho menos en los literarios. Tampoco la literatura es para mí una catarsis ni un intento de sanación. Puede ser todo lo contrario, como le ocurrió por ejemplo a Truman Capote con A sangre fría. En ese sentido soy capotiano: creo que después de escribir uno puede terminar peor de lo que estaba antes. Por otro lado, mi primera novela no hablaba de la guerra interna, sino de la etapa final del régimen de Fujimori, al que en la literatura se suele asociar a la guerra contra Sendero, pero obviamente es mucho más que eso. En esa novela quería era indagar en los efectos cotidianos de un régimen como el suyo que para mí, como adolescente de los noventa, es un tema mucho más cercano que la guerra interna. 

¿NO CREES QUE CON ESTE TIPO DE NOVELA ESTÁ OCURRIENDO LO QUE EN LA EPOCA DE MIGUEL DE CERVANTES CON LAS NOVELAS DE CABALLERIA, HASTA QUE EL QUIJOTE SEPULTÓ A TODAS NO QUERIENDO PERTENECER A ESTE GÉNERO?
Más allá de la referencia al Quijote y las novelas de caballería, que sería una discusión diferente, mi intención no es terminar con las novelas sobre el conflicto armado interno. No es que quiera desaparecer todos esos libros ni mandarlos a la hoguera, sino que nos preguntemos por la relevancia que tienen esos libros en conjunto, más allá de casos individuales. Y en segundo lugar, pensar qué otras maneras de hacer literatura política existen. Literatura política sin guerra interna: me gustaría que hubiera más de eso. 

EN ESTE PUNTO, SE HA LOGRADO YA ESCRIBIR LA GRAN NOVELA SOBRE LOS AÑOS 80? QUE OPINAS DE LA OBRA DE TEATRO LA CAUTIVA? ¿SERÁ ESA, AUN NO SIENDO LITERATURA PROPIAMENTE DICHA?
No creo que tenga que existir una “gran” novela sobre los 80. Eso estaba bien en épocas con menos flujo de información, menos trabajo intelectual desde diversas disciplinas y más fe en la existencia del genio individual que viene a explicarlo todo y termina determinando la versión final de la historia universal. Lo que sí tendría que haber son mejores novelas de todo tipo. Mientras más existan, mucho mejor. Creo que se ha avanzado bastante en los últimos años y que seguiremos en ascenso. 

CRITICASTE DE ALGUNA MANERA A LA GENERACION COCHE BOMBA,POR SU AFICION AL MARKETING. SI ESTE EL UNICO MOVIL DE ESCRIBIR NOVELAS, ¿QUÉ FUTURO LE ESPERA A LA LITERATURA EN PERÚ?
No, en absoluto. No me interesan las motivaciones particulares de los escritores al momento de sentarse a escribir. No me importa si alguien escribe para vender o porque realmente siente una pulsión interna por abordar un tema determinado. Creo que eso es irrelevante. Lo importante es el resultado: si es el libro es bueno o malo, cuál es su verdadero aporte, etc. En cuanto al futuro de la literatura peruana, como decía en la pregunta anterior, soy muy optimista. 

UNO DE TUS HEROES DE FICCIÓN ES ROCKY BALBOA. ¿PORQUE REPRESENTA AL HÉROE DURO Y LATINO O PORQUE TE AGRADA EL BOX? Y FINALMENTE, ¿SE PUEDE SENTIR AL PERÚ DESDE TAN LEJOS? ¿DESDE CUÁNDO RADICAS EN FILADELFIA?
Vivo en Filadelfia hace cuatro años, y desde allá, como desde cualquier otra parte del mundo, se puede ver al Perú tanto como uno quiera. Y a veces quiero verlo mucho y otras no tanto. Y no por absoluto desinterés o por total indiferencia sino porque la lejanía nos acerca a otras realidades que también son interesantes de explorar. En cuanto a Rocky, escribí un cuento sobre él porque es uno de los héroes de Filadelfia, sin importar que sea un personaje de ficción. Y lo usé como punto de partida para escribir sobre los peruanos migrantes y sus problemas, que en mi opinión son básicamente de ciudadanía y de dinero. Existe un gran corpus literario que tiene como presupuesto que el problema del migrante es la diferencia cultural, la lengua, que extraña a sus amigos, a su familia o la comida de su país. Es decir, puro culturalismo y sentimentalismo. Lo que yo quiero explorar es el otro problema de la migración, que creo es más relevante: la ilegalidad y la explotación económica.